“Cualquiera es gobernador si le otorgan ese honor.” (Refrán)
El término candidato denomina a quien espera obtener un lugar donde ubicarse. Entre otros, sus sinónimos son: postulante, pretendiente o aspirante.
Quien intenta desempeñarse, en función de los demás, ha de ser idóneo por sus cualidades. Su personalidad ha de reflejar honestidad en su modo de ser y proceder, en sus decisiones e iniciativas. El compromiso y la responsabilidad han de coincidir, en cualquier situación, oficio o empleo.
En la convivencia ciudadana, quien pretende ocupar un cargo ha de tener una acertada conducta ética. En política, dentro de un régimen democrático, eso le cabe al ciudadano que aspira participar en los destinos de su país, El diplomático y escritor francés René de Chateaubriand (1768-1848) enseña: “La verdad política, cualesquiera que sean sus formas, no es más que el orden y la libertad.”
El ex primer ministro británico Winston Churchill (1874-1985) dice: “Tras un recuento electoral, sólo importa quién es el ganador. Todos los demás son perdedores.” De ahí la importancia de no ser perdedor y saber elegir un buen candidato.